Los mercados financieros globales se recuperaron esta semana, marcando un cierre positivo, impulsados por indicios de una posible relajación en las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China. Esta situación ha despertado el optimismo entre los inversores, quienes han respondido favorablemente a resultados empresariales más alentadores de lo anticipado.
El índice paneuropeo STOXX 600 experimentó un aumento del 0,3%, encaminándose hacia un avance semanal del 2,8%, lo que representa dos semanas consecutivas de crecimiento. Además, otros índices relevantes como el DAX alemán, el CAC 40 francés y el IBEX español también reportaron subidas, con variaciones que oscilan entre el 0,1% y el 0,9%.
Optimismo en Wall Street
En Wall Street, los futuros mostraron una tendencia alcista después de que Alphabet, la empresa matriz de Google, superara las expectativas de ganancias y reafirmara sus objetivos de inversión en inteligencia artificial. Este anuncio impulsó sus acciones en casi un 5% en las operaciones posteriores al cierre del mercado.
Contexto de distensión comercial
Este repunte se produce en un contexto en el que China está considerando eximir ciertas importaciones de Estados Unidos de los aranceles del 125%. Esta medida, comunicada a empresas seleccionadas, se interpreta como un intento de disminuir las tensiones en un conflicto que ha amenazado con frenar el crecimiento global.
Por su parte, el presidente Donald Trump ha moderado su postura respecto a la guerra comercial, anunciando una suspensión de 90 días para la mayoría de los aranceles impuestos. Aunque no se han concretado acuerdos, esta iniciativa ha generado expectativas positivas entre los inversores. Sin embargo, aliados como la Unión Europea continúan enfrentando un arancel base del 10%, además de tasas más altas en productos como acero y automóviles.
El nivel actual de aranceles parece insostenible, pero estabilizar la situación tomará tiempo y aún es incierto en qué punto se resolverá, comentó Richard Flax, director de inversiones en Moneyfarm.
El rendimiento del dólar y otros activos
Después de semanas de volatilidad, el dólar ha logrado recuperar terreno. El índice del dólar subió un 0,2% durante la semana, situándose en 99,623, mientras que cotizaba cerca de 1,1330 dólares por euro y 143,4 yenes por dólar.
Los sectores europeos que mejor desempeño mostraron incluyen las acciones de defensa, con un aumento del 2,4%, y el sector de construcción y materiales, que avanzó un 1,5%. Un ejemplo notable es Safran, un fabricante francés de motores aeronáuticos, cuyas acciones subieron un 4,8% tras reportar ingresos del primer trimestre que superaron las expectativas y reafirmar sus objetivos anuales, incluso sin contar con exenciones arancelarias.
Desafíos en el horizonte
A pesar del optimismo en los mercados, hay señales de advertencia. Grandes compañías estadounidenses como Procter & Gamble y PepsiCo han ajustado o retirado sus previsiones financieras, citando incertidumbres entre los consumidores. Además, el ratio oro/S&P 500, que mide el pesimismo de los inversores, ha alcanzado su nivel más alto desde la crisis de la pandemia en 2020, mientras el oro se mantiene firme en 3.296 dólares por onza.
Por otro lado, los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE. UU. se estabilizaron tras semanas de presión, con la tasa a 10 años en torno al 4,30%. En Japón, los rendimientos también aumentaron a lo largo de toda la curva, tras la divulgación de una inflación en Tokio superior a lo esperado.
En resumen, el clima actual en los mercados es de cauteloso optimismo, con señales de distensión entre potencias económicas, aunque los inversores deben permanecer alertas ante posibles reveses en el futuro. ¿Cómo puede beneficiarte este contexto? Mantente informado y analiza las oportunidades que surgen en este dinámico entorno financiero.
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